Hace un año que la sonrisa y la humanidad de Javier Diez Canseco son eternas
Domingo, 04 de mayo de 2014 | 10:18 am
Tal vez la copiosa barba que siempre lo caracterizó desde sus
años universitarios no permitió mostrar la sonrisa que lo acompañó toda
su vida. Tampoco la risa cuando solía reunirse con sus amigos más
cercanos, al punto que se burlaba de su propia condición física.
"El hombre es el único animal que se tropieza con la misma piedra dos veces. Espero que no sea así. Para mí es grave tropezarme... Tengo solo una pierna sana", me respondió y rió cuando en una entrevista en plena campaña le pregunté si no temía equivocarse nuevamente al apoyar a Humala.
Tenía barrio a pesar de su origen acomodado, la sonrisa a flor cada mañana y se reía con mucha frecuencia de sí mismo de su problema con la pierna.
Con esa misma sonrisa, Javier no dudaba en sacar a bailar a su esposa Liliana Panizo en los encuentros familiares. Eran pequeños momentos en que, junto a sus cinco hijos, dejaba el overol combativo por un momento, y las marchas se transformaban en pasos de salsa.
Fuera de esa imagen de congresista confrontacional y que solía levantar la voz para polemizar, había otros momentos en que a Javier lo ganaba la humanidad por el desposeído o el amigo que estaba mal. Cuando no duda en reclamar por la falta de atención o el apoyo con medicinas para quienes no podían comprarlas.
"Hubo innumerables ocasiones en que buscó ayuda para personas sin pedir nada a cambio. Sentía el dolor del prójimo como propio", recuerda su amigo Javier Mujica.
El historiador Antonio Zapata, que lo conoció desde los años de la Universidad Católica, dice que Diez Canseco siempre se preocupaba por la salud de un amigo o de alguien a quien quería apoyar.
"Se preocupaba cuando alguien estaba mal, hablaba con el médico, quería saber detalles. Y no hablo de un caso en especial, fueron miles las veces que lo hizo", dice su amigo Zapata.
Al tiempo de trabajar por el prójimo, Diez Canseco no veía izquierda ni derecha y ahí demostraba su inmensa humanidad. En el último trayecto de su carrera trabajó junto al fujimorista Giancarlo Vachelli en la aprobación de la Ley de Personas con Discapacidad. El más necesitado era su ideal.
Rendirán un homenaje hoy en el Parque de la Exposición
Familiares y amigos de Javier Diez Canseco se reunirán esta tarde para conmemorar el primer año de fallecimiento del ex líder de la izquierda peruana. Allí estarán quienes compartieron marchas, ideales, proyectos, fiestas y alegrías. Y quienes, hasta el último día, remaron para que la muerte no se lleve a ese amigo con quien compartieron batallas.
El acto se realizará en el Parque de la Exposición y en el mismo también participará el comité promotor de la Fundación Javier Diez Canseco.
Desde las cuatro y media de la tarde se inaugurará la muestra fotográfica “JDC: Una vida singular”, que hará un recorrido por la amplia trayectoria del ex congresista. Luego, a partir de las seis, tendrá lugar un concierto gratuito en el que participarán, entre otros, Del Pueblo del Barrio, Vaselina Rockabilly, Daniel F., Cimarrones, Jorge Millones, Margot Palomino y Kiri Escobar.
La trayectoria política de Diez Canseco comprende siete periodos como parlamentario desde su participación en la Asamblea Constituyente de 1979.
"El hombre es el único animal que se tropieza con la misma piedra dos veces. Espero que no sea así. Para mí es grave tropezarme... Tengo solo una pierna sana", me respondió y rió cuando en una entrevista en plena campaña le pregunté si no temía equivocarse nuevamente al apoyar a Humala.
Tenía barrio a pesar de su origen acomodado, la sonrisa a flor cada mañana y se reía con mucha frecuencia de sí mismo de su problema con la pierna.
Con esa misma sonrisa, Javier no dudaba en sacar a bailar a su esposa Liliana Panizo en los encuentros familiares. Eran pequeños momentos en que, junto a sus cinco hijos, dejaba el overol combativo por un momento, y las marchas se transformaban en pasos de salsa.
Fuera de esa imagen de congresista confrontacional y que solía levantar la voz para polemizar, había otros momentos en que a Javier lo ganaba la humanidad por el desposeído o el amigo que estaba mal. Cuando no duda en reclamar por la falta de atención o el apoyo con medicinas para quienes no podían comprarlas.
"Hubo innumerables ocasiones en que buscó ayuda para personas sin pedir nada a cambio. Sentía el dolor del prójimo como propio", recuerda su amigo Javier Mujica.
El historiador Antonio Zapata, que lo conoció desde los años de la Universidad Católica, dice que Diez Canseco siempre se preocupaba por la salud de un amigo o de alguien a quien quería apoyar.
"Se preocupaba cuando alguien estaba mal, hablaba con el médico, quería saber detalles. Y no hablo de un caso en especial, fueron miles las veces que lo hizo", dice su amigo Zapata.
Al tiempo de trabajar por el prójimo, Diez Canseco no veía izquierda ni derecha y ahí demostraba su inmensa humanidad. En el último trayecto de su carrera trabajó junto al fujimorista Giancarlo Vachelli en la aprobación de la Ley de Personas con Discapacidad. El más necesitado era su ideal.
Rendirán un homenaje hoy en el Parque de la Exposición
Familiares y amigos de Javier Diez Canseco se reunirán esta tarde para conmemorar el primer año de fallecimiento del ex líder de la izquierda peruana. Allí estarán quienes compartieron marchas, ideales, proyectos, fiestas y alegrías. Y quienes, hasta el último día, remaron para que la muerte no se lleve a ese amigo con quien compartieron batallas.
El acto se realizará en el Parque de la Exposición y en el mismo también participará el comité promotor de la Fundación Javier Diez Canseco.
Desde las cuatro y media de la tarde se inaugurará la muestra fotográfica “JDC: Una vida singular”, que hará un recorrido por la amplia trayectoria del ex congresista. Luego, a partir de las seis, tendrá lugar un concierto gratuito en el que participarán, entre otros, Del Pueblo del Barrio, Vaselina Rockabilly, Daniel F., Cimarrones, Jorge Millones, Margot Palomino y Kiri Escobar.
La trayectoria política de Diez Canseco comprende siete periodos como parlamentario desde su participación en la Asamblea Constituyente de 1979.
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