14:24 - 17 Diciembre 2013
La producción de acero no ha sido
aprovechada por el Gobierno Regional de Áncash para dinamizar la
industria de la metalmecánica en alianza con el sector privado, apunta
hoy Luis Luna.
El modelo de crecimiento económico
implementado por el actual Gobierno Regional de Áncash se encuentra
agotado y requiere ser cambiado urgentemente. Su financiamiento siempre
ha provenido del sector público, principalmente del canon minero y de
los aportes del gobierno central. Esta inversión no ha sido suficiente,
siguen pendientes muchas necesidades insatisfechas, tales como
educación, salud, trabajo y seguridad. Es momento de mirar a la
inversión privada para implementar políticas de acciones conjuntas entre
gobierno regional y empresa privada.
No solo se trata de motivar a la
inversión privada para que se quede en nuestra jurisdicción con sus
particulares objetivos, sino de hacerlos invertir articulándolos con los
objetivos e intereses de la región. Una de las fortalezas que tiene
este sector en nuestra región es la producción de acero a cargo de la
empresa Siderperú. Sin embargo, su ventaja comparativa no ha sido bien
aprovechada para dinamizar la industria de la metalmecánica. Una alianza
estratégica favorable a nuestros intereses pasa por crear un parque
industrial para la metalmecánica cuyos actores, Gobierno Regional de
Áncash y Siderperú, concierten objetivos comunes. No es posible que una
región que produce acero no sea capaz de producir clavos, tornillos,
muebles, herramientas para el agro, etc. La industrialización y el valor
agregado deben ir de la mano para ser competitivos. La metalmecánica
debe ser la locomotora que dinamice la economía regional y sirva de
ejemplo para los otros sectores económicos.
Transcurrido los años, Siderperú ha
perdido el liderazgo nacional que históricamente le pertenecía, ha sido
reemplazada por la empresa Aceros Arequipa cuya producción se estima en
58%, en tanto que Siderperu el 36% de un total de casi 1 millón de
toneladas anuales de acero producidas en el país. A la Luz de los
resultados expresados en los estados financieros, el 2008 fue el último
año que Siderperú tuvo utilidades. Diferente resultado tiene Aceros
Arequipa, actualmente se ubica en el puesto 76 de las 150 empresas más
rentables de América Latina. Lógicamente, la distinta suerte que tienen
las dos empresas productoras de acero tiene una explicación. A nuestro
criterio, el meollo del asunto obedece a los intereses no comunes que
tiene la empresa Gerdau y nuestro país.
Necesitamos avanzar en esta propuesta,
adicionalmente al “costo mínimo” que tendría el servicio de transporte
del acero en la ciudad de Chimbote, también tenemos de ventaja
comparativa la formación de personal técnico y gente experimentada en
esta actividad. Solo necesitamos políticas regionales que impulsen el
parque industrial de la metalmecánica. Es importante crear las
condiciones para que se constituya la demanda de productos que a la
fecha Siderperú no los realiza. Rompamos el círculo vicioso de la no
producción orientado al interior de nuestro país por la falta de
mercado. Aprovechemos la logística, el personal y las maquinarias que
tiene Siderperú para impulsar este proyecto.
La generación de empleo, la mejora en la
recaudación fiscal, la captación de mayores tributos municipales, el
uso más común del mercado financiero, más capacidad adquisitiva en el
bolsillo de ciudadanos chimbotanos, etc., tendremos como resultado de
esta propuesta. Debemos entender, necesariamente, que el primer peldaño
que debe implementar toda sociedad que quiere industrializar sus
actividades económicas es la metalmecánica. A partir de este sector
económico se harán más competitivos los sectores no menos importantes en
nuestra región, tales como el agro y la pesca.
Hagamos que la metalmecánica sea nuestro sector bandera. Señor presidente regional, tiene usted la palabra.
Mg. Econ. Luis Luna Villarreal
Decano del Colegio de Economistas Áncash Costa
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